TESTIMONIOS

Testimonios de algunos participantes
 
Catalina Vivar 30 años. Diseñadora gráfica Chile. Ocho días llenos de amor, ayuda, diversión, apertura, aprendizaje y nuevos conocimientos sobre uno mismo y nuestro mundo.

Daniela Riffo 28 años. Ejecutiva comercial Chile. Experiencia más intensa que subirme a una montaña rusa de emociones y sensaciones.

Marcelo Vidal 37 años. Pedagogía y Clown Chile. Agradezco la oportunidad que me dio la vida de conocer gente con un corazón gigante.

Francesca Moreno 34 años. Historiadora Colombia. Mi actividad preferida las Clownstelaciones Familiares, en sus varias declinaciones. Descubrí un montón.

Maria Francia Prado 33 años. Diseñador gráfico Chile. Pocas veces lloro de felicidad y aquí ocurrió.

María José Jaureguiberry 31 años. Actriz y directora de arte Chile. Me ayudó a reencontrarme con mi clown.

Misuki Takaya 24 años. Actriz México. Hacía años que no reía tanto ni disfrutaba la escena de la forma como la viví.

Lucía de la Maza 40 años. Actriz, dramaturga y gestora cultural Chile. Más que un campamento, un encuentro conmigo misma, revalorizando el rol social del arte. Agradezco que mi hija haya tenido un espacio para compartir con otros niños y adultos.

Margarita Abarzua 39 años. Técnico paramédico Chile. Escuchar hablar y decir como se sentía mi hija adolescente hizo en mi que algo se moviera.

Constanza Vera 15 años. Estudiante Chile. Logré sentirme yo de nuevo.

María Pía Larrain 30 años. Kinesiologa Chile. Sabía que venía a algo lindo, pero no dimensioné lo completo que podría ser.

Ingrid Presti 35 años. Diseñadora de joyas Francia. Une expérience très forte pour le partage et vivre avec des clowns qui cultiven l'envie d'être hereux.

Lorena Gutierrez 35 años. Profesora de Yoga y Pilates Chile. El hacerlo con mi hija y recibir tanto apoyo y cuidado amoroso a ella me permitió hacer todo con total tranquilidad.

Francisca Pedreros 25 años. Actriz, Licenciada en Actuación Chile. Es una experiencia enriquecedora, tanto personal como artística.

Leopoldo Rosas 39 años. Ingeniero Civil Informático Chile. Vine por nuevos desafíos y me voy con una maleta llena de ilusiones y trabajo para hacer.

Matías Valenzuela, 26 años. Actor Chile. Me liberé mucho, entendí muchas cosas y comprendí mucho más a Lecoq.

Verónica Barrera 48 años. Actriz y pedagoga teatral Chile. Gracias por esta gran posibilidad de comprender que el clown está siempre ahí adentro.

Matías Nuñez 33 años. Profesor Chile. Clownpamento nos presenta la rebeldía que la persona tiene en la vida diaria al entregar hacia el otro lo más hermoso que uno tiene; la sonrisa y la alegría.

Millarca Valenzuela 37 años. Geóloga Chile. Es la primera vez que me pongo una nariz y lo que fue revelándose de a poco al usarla fueron aspectos que no visitaba hacia mucho, como la ternura, la picardía y la creatividad espontánea.

Giggliola Cassi 37 años. Abogado Chile. Con esta experiencia aprendí a pensar menos y disfrutar más del aquí y el ahora.

Mª Antonia Velez 29 años. Licenciada en artes escénica Colombia. El Clownpamento un mundo paralelo para encontrar el tuyo propio.

Patricio Narváez 28 años. Actor Chile. Me devolvió la alegría y voluntad de darle algo al mundo.

Valeria Pino 30 años. Ingeniero en conectividad y redes Chile. Excelente oportunidad para hacer buenos amigos.

Daniela Pizarro 32 años. Artista comunitaria y textil Chile. Este es el comienzo de la revolución de la risa.

 
Laura Álamo. 35 años. Psicóloga. Arte terapeuta. Catalunya, (España). El Clownpamento no sólo te enseña sobre ti, sobre tus luces y sombras, si no que además, muestra el camino hacía donde deberían caminar las sociedades actuales. Si somos capaces de funcionar desde la apertura al otro y recibirlo como hermano en una convivencia de nueve días sería posible pensar en sociedades futuras con este tipo de funcionamiento.

Pascale Morschhauser. 32 años. Clown. Francia. Clownpamento, más que un taller, fue para mi un viaje dentro de mi viaje a Chile, una burbuja de protección donde se puede trabajar el clown simple y profundo al mismo tiempo (…) es un tesoro que pueden compartir jóvenes y ancianos, artistas y directores de empresa, personas con deficiencias, chilenos, extranjeros, etc. Un vinculo social para compartir la parte universal del clown, el ser demasiado humano.

Sarah Villaret. 27 años. Francia. El Clownpamento es una experiencia intensa. Muy emocionante, lleva a preguntarse muchas cosas sobre sí mismo y la manera de relacionarse con los demás. (...) Buscando su clown, uno aprende a ubicar se cada día más en su cuerpo y a conectarse con sus emociones.

Carlos Muñoz, 25 años. Ingeniero. Valparaiso. “…para mí fue una de las semanas
más hermosas y trascendentes que he vivido, solo espero que se vuelva a repetir... Logré verme como niño, ese que un día fui, pero que el tiempo y el deber ser lo apagaron... reír de lo simple, de lo absurdo y principalmente de mi mismo”.
Eliza Zuleta, 25 años. Actriz. Santiago de Chile. “Mis expectativas eran encontrar mi clown y se cumplieron con creces... experiencia necesaria, mágica, única e inolvidable, capaz de cambiar la perspectiva de mi mirada”.
Javier Guevara, 27 años. Ingeniero de sistemas. Bogotá, Colombia. “Cuando llegué al lugar estaba un poco inquieto de ver que había personas que tenían experiencia artística, o en circo o en teatro, pero vi que también había personas que no tenían ninguna formación en estas áreas... Yo diría que el clownpamento fue una gran experiencia muy enriquecedora y gratificante, además de ser una fuente de conocimiento de mí mismo”.  
Felipe Muñoz, 20 años. Estudiante. Chillan, Chile. “Fue una experiencia que ha marcado un antes y un después en mi vida y en la creación de mi clown para una mejor entrega a los niños del hospital herminda Martín de Chillan.” 
Francisca Sepúlveda, 18 años. Estudiante. Santiago de Chile. “Me ayudó a sanar
 heridas, a guardar conocimiento, a conocer gente maravillosa, a conocerme
mas a mi misma...”.
Ignacio Mayorga, 20 años. Estudiante. Pucón, Chile. “...descubrí a esa persona
 loca, loca, loca... me pareció maravilloso encontrar esa parte mía que estaba
 escondida”.

Julie Pelicand, 35 años. Medico Pediatra. París, Francia. “...après deux jours de
 travail, de conscience corporelle, de créativité, de clown et de contacts avec
 chacun, j’ai pris conscience que je n’allais pas FAIRE ce clownpamento mais
 que j’allais vraiment le VIVRE, le RESSENTIR au fond de moi et avec mes
 campagnons”.

Carla Orellana, 38 años. Diseñadora. Santiago de Chile. “Tuve una muy linda
 experiencia. Yo iba en busca de más teoría... pero creo que en los 7 días
, me sirvió mucho la práctica y el compartir conocimientos con mis compañeros
 (as). Este clownpamento lo llevo en mi corazón y sobretodo la forma en que
 los profes entregaron su conocimiento: Con mucho amor, verdad y buena
 intención.”
Mario Muñoz, 28años. Actor. Santiago de Chile. “Puedo decir que existe un 

Antes y un después del Clownpamento. Fueron 6 días de trabajo intenso. 

Necesarios 
para despertar la conciencia corporal, mental y colectiva. En la diversidad de
 pen nuevo aire se respiró. Mi gran objetivo fue reencontrarme con mi payaso
 y enfocarlo. Estar atento a los pormenores que se presentaban en escena,
 haciéndolos parte del juego”.
Melissa Guevara, 21 años. Estudiante. Bogotá, Colombia. “... hay espacio para

 todos, espacio para ser como somos.... La nariz, la pequeña nariz roja me dió


 la posibilidad de ser trasparente, espontanea y atrevida. Fue hermoso ver el

 resto de clowns, el resto de colores, el resto de personas en un mismo


 espacio… jugar, divertirnos, payasear... la alegría, las sonrisas, los cantos, las


 danzas, las miradas, los corazones, “los abrazos”, las vidas, “las narices”, los


 aromas, los ojos, las personas …”.


Shenyin Loo Valdés, 33 años. Psicólogo. Tocopilla. Chile. “Clownpamento fue

 terapia, fue risa, fue amistad, fue libertad y fue amor.¿Qué más necesitamos


 para ser felices? ...Estaban muchos artistas talentosos y estaba yo y otros


 inexpertos. No fue fácil pero siempre hubo un ambiente protegido para


 quienes el actuar es un bonito desafío pero no es una profesión”. 


Verónica López, 50 años. Contador Auditor. Santiago de Chile. “Para mí el

 clownpamento tuvo un significado muy especial, mis expectativas eran


 aprender y experimentar algo nuevo sin más aspiraciones que eso y abrí mi


 mente y mi corazón... Logre amigarme con mi lado estructurado y serio y con


  mi lado lúdico y relajado”.

Daniela, estudiante 4º psicología. Fue precioso. Me siento capaz de más cosas que antes y veo a los otros que me rodean, las escucho mejor, los siento”.
Guillermo, psicólogo. Alegría interior. Libertad para ser. Estado de ebriedad permanente,

Daniela, estudiante de turismo. Fue algo totalmente nuevo lleno de felicidad y alegría. Vivir lo ridículo es una experiencia mágica.

(Mariluz, secretaria bilingüe. Descubrí lo maravilloso que es no perder la capacidad de jugar. Atesoro la cercanía que logré con cada uno de los participantes, miembros de esta nueva familia.

Luis, médico psiquiatra. Hola niño travieso, gracias por tu torpeza motora que me enseñó a romper los fríos ambientes sociales, ahora sé que mis caras de angustia eran las risas de todos.

Irene, profesora literatura española. El cuerpo sabe mucho y este espacio ha sido amoroso y energético en el aquí y ahora. Los miedos pueden vencerse jugando y queda tanto por jugar e ir descubriendo más. Un gran paso amoroso.

Cristián, mago. Ventana de locura y pasión para tener un mundo mejor.

Camila, estudiante 3º medio. Me divertí como nunca, me dieron ganas de hacer el ridículo siempre y de jugar todo el día.

Tomás, actor. Fue como viajar, ir lejos, partimos a pie y terminamos volando.